Se fueron 6 CRJ arrendados por la ex Pluna a Canadá


Los seis CRJ-900 que la ex Pluna utilizó mediante leasing han retornado en las últimas horas a Canadá, donde regresarán a la custodia del EDC Bank , que financió la llegada de las aeronaves a la aerolínea uruguaya entre 2010 y 2011, la cual, mayoritariamente, no contó con el apoyo del último directorio estatal integrado a la misma, hasta hace poco presidido por el Cr. Fernando Pasadores, por entenderse que conformaban una flota excesiva para una aerolínea focalizada en el Cono Sur.

Con el primer despegue producido poco después de las 08.30, horas después había partido desde el Aeropuerto Internacional de Carrasco toda la flota, que, tras una escala en Lima, se dirige a Montreal, ya con matrícula canadiense. Las seis aeronaves fueron adquiridos por Pluna Sociedad Anónima entre 2010 y noviembre de 2011 bajo el formato de leasing (arrendamiento con derecho a compra), con previsión de permanecer contratados en la empresa hasta 2021, habiendo negociado las autoridades uruguayas una rescisión contractual y el perdón de las deudas hasta la fecha

Se trata de aeronaves cronológicamente más jóvenes y con menos horas de vuelo en sus células que los otros siete aviones que mantenía la empresa ,los cuales que quedarán en el país por el momento, dado que han sido garantizados por el Estado uruguayo en 2007, contra la opinión de la oposición y el Tribunal de Cuentas con el gobierno como socio minoritario al 25% , de un grupo, posteriormente fraudulento, denominado Leadgate, a los que tampoco se pudo rematar en una dudosa subasta con un solo postulante insolvente, el grupo Cosmo.

Ahora, más que nada con fines electorales, el gobierno dice estimular un dificil proyecto: la creación de una cooperativa con los ex trabajadores de Pluna, cuyo despido parcial ya ha costado más de 11 millones de dólares, sin contar futuros juicios laborales. Los mismos piden un préstamo blando de 30 millones de dólares, subsidios para el combustible, mantenimiento de los CRJ pago hasta 2014 y que el Estado, implícitamente, se haga cargo de las voluminosas multas y otras deudas en el exterior, que podrían orillar los 50 millones de dólares, generadas al cierre intempestivo y caótico de Pluna.

En el mejor y más improbable de los escenarios, este cuadro deficitario no resistiría más allá del primer semestre de 2015 sin hacer eclosión en forma aún más crítica que la vieja Pluna, no obstante, ya habrían pasado las elecciones nacionales de 2014,y las municipales de mayo de 2015. Aprovechando las circunstancias el gremio de la ex Pluna ha pedido hasta los servicios de handling del aeropuerto montevieeano (algo dificil de conseguir y poco realista).

Fuente: airline92.com