A tres años de haber regresado a la Argentina con un vuelo directo desde Amsterdam tras haberse retirado durante la crisis de 2001, la aerolínea KLM busca reforzar su presencia en el país en el corto y mediano plazo pese a la actual coyuntura económica y el contexto mundial que atraviesa la industria a raíz del alto precio del petróleo. En el marco del lanzamiento de la ruta Buenos Aires-Santiago, cuyo vuelo inaugural se realizó el lunes pasado por la mañana, el director general de operaciones de la compañía (Chief Operating Officer, COO), Pieter Elbers, se refirió a la importancia de anexar el tramo Chile para el vuelo que proviene de la capital holandesa y adelantó que prevén incrementar la frecuencia hasta hacerla diaria, tal vez el año próximo. También se refirió al escenario local y aunque transmitió preocupación, al mismo tiempo se mostró confiado de que el Gobierno tome las medidas correctas.
¿Cuáles son los planes de KLM para la región, y especialmente para la Argentina?
KML-Air France está desembarcando en Latinoamérica y particularmente en el Cono Sur. Reabrimos nuestro vuelo Amsterdam-Buenos Aires en el invierno de 2011 y ahora sumamos la conexión con Santiago de Chile para poder operar tres veces por semana un vuelo lleno. Y esperamos incrementar la frecuencia en el futuro. Tal vez vayamos a cuatro o cinco el año próximo para alcanzar, en algún momento, un vuelo diario.
¿Cree que a partir de la devaluación se incrementará la afluencia de turismo europeo al país?
Para este vuelo, vendemos tickets en Buenos Aires pero también en Europa, por lo que la variación del tipo de cambio nos permite aceptar más pasajeros desde la Argentina o más desde Europa, dependiendo de cómo está el valor. La devaluación reciente de la moneda hizo que sea más barato para los europeos venir a la Argentina a hacer negocios o invertir, por lo que esperamos un incremento en este sentido.
¿Le preocupa la situación económica del país?
Estamos siguiéndola con mucha cercanía. Tenemos mucha confianza en que el Gobierno tomará las medidas en el sentido correcto, pero al mismo tiempo es difícil para nosotros que estamos a 11.000 kilómetros de distancia tener una visión clara de lo que está pasando. Sabemos que en muchas de las situaciones no se trata de algo racional sino irracional en términos del comportamiento de los mercados financieros y las instituciones. Por lo que siempre estamos preocupados por esto.
¿Qué opina sobre los pronósticos de magro crecimiento para este año?
Estamos un poco preocupados con desacelerar el crecimiento para controlar los problemas. Crecer a un buen ritmo es importante; si los mercados financieros están perdiendo la confianza en el país, es un desafío recuperarla.
¿Cuál será el impacto para la compañía?
Podemos manejarlo porque tenemos la posibilidad de balancear los pasajeros de la Argentina con los de Europa. Pero si vamos hacia un escenario de hiperinflación como ocurrió en la historia, sería muy difícil para la compañía también. De todos modos, no esperamos ese escenario. Volamos a más de 80 países en el mundo; siempre hay problemas con los cuales lidiar. En este caso del nuevo tramo a Chile, Santiago es interesante. No teníamos conocimiento de la situación del tipo de cambio cuando decidimos sumar ese destino. Hoy, que hay incertidumbre en los mercados financieros, podemos estar contentos de que Santiago es la oportunidad perfecta para sumar pasajeros de Chile. Irónicamente o de un punto de vista interesante, es bueno tener este destino, ya que nos provee de estabilidad para nuestra ruta.
¿La compañía reportó ganancias en Argentina el año pasado?
No, no tuvimos ganancias, una leve pérdida. Pero vemos que la tendencia es de mejoría.
¿Qué opina de Aerolíneas Argentinas, con la cual comparte el grupo Skyteam?
Estamos contentos de que se haya unido, ya que la Argentina es un país muy importante para el sector. En términos de conexión, todavía tenemos un camino de cooperación ya que nosotros operamos en Ezeiza y los vuelos locales de AA salen de otro aeropuerto. Pero si pensamos más en el largo plazo y en el plan de reestructuración que está haciendo Aerolíneas, confío en que vamos a poder avanzar. Es un desafío la infraestructura local porque el tráfico camina más rápido.
¿Cómo les impacta en el negocio que la reina Máxima sea argentina?
La imagen de Argentina creció mucho por Máxima y su entorno. Se organizan viajes especiales, festivales, la Argentina Week por ella, y eso es bueno para nuestro negocio y para el país. Todavía lamentamos que perdimos la final del mundial de 1978; después de ese episodio, a nadie le gustaba la Argentina, pero a partir de la aparición de Máxima, volvió el agrado de los holandeses por el país (risas).
Fuente: www.cronista.com
Foto: KLM